Señor, no me desprecies y conmigo
Lucha; que sienta, al quebrantar tu mano
La mía, que me tratas como a hermano,
Padre, pues beligerancia consigo
De tu parte; esa lucha es la testigo
Del origen divino de lo humano.
Luchando así comprendo que el arcano
De tu poder es de mi fe el abrigo.
Dime, Señor, tu nombre, pues la brega
Toda esta noche de la vida dura
Y del albor la hora luego llega;
Me has desarmado ya de mi armadura,
Y el alma, así vencida, no sosiega
Hasta que salga de esta senda oscura.
(1 votes, average: 5.00 out of 5)
Versos similares:
- Sobre sentimientos de ausencia de nuestro señor Dulce y fiel esperanza, Mi Cristo, mi Señor y mi deseo: ¿qué bienaventuranza, Qué gusto o qué recreo Podrá haber para mí do no te […]...
- Lo que vos queráis, señor Lo que Vos queráis, Señor, sea lo que Vos queráis. Si queréis que entre las rosas ría hacia los matinales resplandores de la vida, que […]...
- Vos, oh común señor A Fernando de Soria Galvarro Vos, oh común Señor, esta criatura Vuestra ezistes del polvo, i vuestro aliento Le prestó ser, i vida, i movimiento, […]...
- Dulce señor Dulce Señor, enamorado mío, ¿adónde vais con esa cruz pesada? Volved el rostro a una alma lastimada De que os pusiese tal su desvarío. De […]...
- Señor usted no lo sabe Señor usted no lo sabe y sin embargo sus arrugas, tersándome la mañana, me han obligado a iniciar una huelga de novios desde que lo […]...
- Weekend con el señor Al Padre Florentino Azcoitia, S. J. Un poco a la deriva, Viciado de tormentas, Con brújulas que han sido Tatuajes en la piel de mis […]...
- Señor, ahora que mi piel Señor, ahora que mi piel y la suya -después de las sábanas- han formado un nuevo “collage” en el agua, no es el mejor momento […]...
- Merced, conde señor “¡Merçed, conde señor, fija so de vuestra prima! Lo que don Rodrigo fizo yo culpa non avría, E non me desanparedes ca pocos serán los […]...
- En el exilio (i) Escritos cualquier día entre 1980 a 1984 ¡Un día más! ¡Déjame, Señor, vivir los suficientes para tenerlos de nuevo conmigo! El corazón duele mucho más […]...
- A los divinos ojos de nuestro señor Al alma que te adora Vuelve los ojos claros, Cristo amado, Que más que en sí, en ti mora, Y todo su cuidado En sólo […]...
- Remediad, señora mía – Remediad, señora mía, pues podéys. – Señor, no me lo mandéys. – El remedio de mi vida de vos lo espero, señora. – Pues […]...
- Poema del amor ajeno Puedes irte y no importa, pues te quedas conmigo como queda el perfume más allá de la flor. Tú sabes que te quiero, pero no […]...
- Poema del amor lejano Puedes irte y no importa, pues te quedas conmigo como queda un perfume donde había una flor. Tú sabes que te quiero, pero no te […]...
- Poema de la culpa Yo la amé, y era de otro, que también la quería. Perdónala Señor, porque la culpa es mía. Después de haber besado sus cabellos de […]...
- Yo pienso en ti Yo pienso en ti, tú vives en mi mente sola, fija, sin tregua, a toda hora, aunque tal vez el rostro indiferente no deje reflejar […]...
- Es que no suenan los teléfonos ¿Es que no suenan los teléfonos a estas horas? Suena maldito premonición sin números haz la llamada al mundo dime que estás que por esta […]...
- Don del vuelo Y ahora que desperté sin calendario A las puertas de un cielo terrenal Qué vas a hacer conmigo si no atiendo a razones, Si me […]...
- A mario alcaraz Te quiero por ser cuerda y tener cinco dedos Y una guitarra abierta a la voz imposible. Por guardarme secretos. Por compartir conmigo Aquellos veinte […]...
- Dime que sí Dime que sí, compañera, marinera, dime que sí. Dime que he de ver la mar, que en la mar he de quererte. Compañera, dime que […]...
- A un caballero Por grosera cosa ser Los dexó toda la gente; Y vos, por bien parecer, Holgáis, señor, de traer El vuestro públicamente; Por tanto, si no […]...
- Parto Mujer, toda mi sangre está presente contigo en esa lucha que sostienes. Contigo está mi amor incandescente y en tu llanto y en tu duelo […]...
- Letrilla satÍrica ¿Ves aquel señor graduado, roja borla, blanco guante, que nemine discrepante fue en Salamanca aprobado? Pues con su borla, su grado, cátedra, renta y dinero, […]...
- Soneto a la ascensión del señor Jesús, mi amor, que en una nube de oro, Engendrada del llanto de tu ausencia, Al Cielo te trasladas en presencia Del, si alegre, dichoso, […]...
- Vengo del norte xx Mi amante cuerpo esté, Escríbeme a la tierra Miguel Hernández ALGÚN día se posarán los pájaros a cantar En tus brazos, A descubrir que somos […]...
- Nocturno de la ventana HORIZONTE cuadrado para el signo Que, sin quebrar la transparencia, Escribe el nombre de la noche. Lo incapaz de ser canto Allí se vara, signo […]...
- A cristo nuestro señor Cristo dulce y amado, Sin quien vivir un punto no podría; Süave y regalado gozo Del alma mía, Mi bien, mi eterna gloria y alegría. […]...
- El señor de la cada del tiempo I Una campana mueve el aire, Y hay panes, peces, y una copa de vino sobre la mesa. Alguna vez alguien creyó en un día […]...
- Soneto del author al dicho seÑor don luis Quando fue por los dioses acordado que Amor casase con Sabiduría, la pastora Ismenia y muy clara Sophía buscó entre los humanos su traslado. Y […]...
- Los muertos ¡Piedad! ¡Misericordia! . . . Fueron vanos Tanto soberbio afán y lucha tanta. Ay, por nosotros vuestra queja santa Levantad al Señor. ¡Orad, hermanos! Si […]...
- Retorno del amor en la noche triste Ven, amor mío, ven, en esta noche sola y triste de Italia. Son tus hombros fuertes y bellos los que necesito. Son tus preciosos brazos, […]...