Llévame nubecita a lo alto contigo
y cúbreme amorosa con tu cendal de gasa;
que tu orla de tul me sirva, leve abrigo,
para que no me falte el amor de la casa.
Llévame tú que eres, de mis ansias testigo,
ceniciento vigía, fino polvo de brasa,
incansable viajera detrás de mi postigo;
llévame pero pronto, que tu momento pasa.
No me llames poeta; sea a la hermana rosa,
encendida de fuego, áureo halo de oro;
o a la blanca, a la blanca de perfiles de hielo
que entre albos pompones, toda nieve reposa.
No me llames poeta que tus anhelos lloro,
que soy – como el amor fugaz – sombra en el cielo.
(1 votes, average: 5.00 out of 5)
Versos similares:
- En todas las casas En todas las casas siempre habitará un poeta con una hermana (que no es poeta) que le dirá que escriba una biografía sobre su familia. […]...
- Rosa de alejandria Docta en los secretos de la abracadabra, dispersó en el aire, tus letras, mi mano, y al caer, formóse aquella palabra, cifra de tu enigma […]...
- Cultivo una rosa blanca Cultivo una rosa blanca En Julio como en Enero Para el amigo sincero Que me da su mano franca Y para el cruel que me […]...
- Asunción del poeta No la cerca el perfume ni la espina (esa espina que hiere como esquirla) Nada habrá que pretenda consumirla. Tiene luz de la estrella matutina. […]...
- La hora del poeta La guerra estaba necia en su denuedo De sangrar al país. Yo en mi retiro Sorbía sal de agónico suspiro, Mientras corría sangre por el […]...
- El mundo de tu mano Cuando del brazo leas mis Poemas De una noche callada y encendida, Blanca y frágil, la frase nunca oída Ira cambiando todos tus esquemas. La […]...
- Almanzor encomienda el cautivo a su hermana Almançor mandó llamar una infante, su hermana… E muy bien e muy apuestamiente fablava: “Hermana, si me vós amades, entrad en esa casa Do yaz […]...
- Humilde mayo Mayo trajo la flor, la milagrosa Palabra vegetal que arrulla el viento. Mayo pobló su propio firmamento Con la sola presencia de una rosa. Yo […]...
- CanciÓn en blanco y en rosa Mujer blanca, mujer rosa. Se me acerca o se va lejos. Por virtud maravillosa, Se me vuelve mariposa En un mundo de reflejos. Mujer blanca, […]...
- No me llames poeta No me llames poeta – un nombre con laurel – Porque mi voz apenas para cantar acierta; Acaso suavizada por amorosa miel, Tal vez unos […]...
- Sacrificio Los ángeles llegan Con su halo de versos su estela de notas celestiales Para iluminar Cae la lluvia, se acorrala la luz Los ángeles llegan […]...
- Como tÚ quieras Bajo el sol tropical de las Antillas Marchítase la flor; Como ella palidecen tus mejillas Al fuego del amor. Mas la pálida rosa, vida mía, […]...
- Introduction Leyendo un claro día Mis bien amados versos, He visto en el profundo Espejo de mis sueños Que una verdad divina Temblando está de miedo, […]...
- Siempre la rosa Has dicho rosa: rosa, rosa, pesada rosa Sopesando la rosa se te cae de la mano. Tal es en la escritura: ya cambió. Ya no […]...
- Métrica del encantamiento, la predicción, el conjuro (para que mis pasos y tus pasos…) He recogido el polvo de tus pasos, y lo he puesto en un cesto de mimbre sobre el agua, lo he esparcido en el viento, […]...
- El hijo del sueño Un hijo… Tú sabes, tú sientes qué es eso? Ver nacer la vida del fondo de un beso, Por un inefable milagro de amor; Un […]...
- El busto de nieve De amor tentado un penitente un día con nieve un busto de mujer formaba, y el cuerpo al busto con furor juntaba, templando el fuego […]...
- Supremo triunfo Estoy ahora impregnada toda yo de dulzura. Desde que me besaste, toda yo soy amor. Y en la vida y la muerte, en lecho y […]...
- Al clavel Al clavel A ti, clavel ardiente, invidia de la llama i de l’Aurora, miró al nacer más blandamente Flora: color te dio ecelente i del […]...
- Siembra Cuando de mí no quede sino un árbol, Cuando mis huesos se hayan esparcido Bajo la tierra madre; Cuando de ti no quede sino una […]...
- Nota social El poeta llega a la estación. El poeta desciende. El poeta toma un auto. El poeta va para el hotel. Y mientras hace eso como […]...
- Obligado por la cerilla El pez vela desaguó sus contornos obligado por la cerilla de la vida. Lo veo sin sus perfiles azules, sin naturaleza que mostrar para la […]...
- Qué blanca viene la luna ¡Qué blanca viene la luna! – Si me muero deste mal, no me entierren en sagrado; fáganlo en un praderío donde non pase ganado; dejen […]...
- El abencerraje cuenta a don rodrigo El Abencerraje cuenta a don Rodrigo, camino de la prisión, después de la Derrota, sus amores con Jarifa; en este fragmento de romance le refiere […]...
- Tan sencillo este amor Tan sencillo este amor, tan luminoso, y tú no aciertas nunca a saber de verdad lo que me pasa. Lo que me pasa, amor, es […]...
- El herido – Dame, tu pañuelo, hermana, que vengo muy mal herido. -Dime qué pañuelo quieres, si el rosa o color de olivo. -Quiero un pañuelo bordado, […]...
- El amor es otra cosa, señores Uno se hace a la idea, desde la infancia, de que el amor es cosa favorable puesta en endecasílabos, señores. Pero el amor es todo […]...
- Carta susurra cartas la luna arrullo de piedra que estremecen alitas en cumpleaños al tronco de fuego lenguas entierran ríos anudados ‘Hermana, sucede que soy poeta […]...
- Rosa de bronce La casa profané con mi lascivia, la sangre derramé. Fui el hijo pródigo. Encendida pantera de la Libia se alzó mi corazón. Mi orgullo, código. […]...
- De poeta a poeta Sabes – y sueles – hacer el amor como el poeta construye sus versos: con acordada mezcla de pasión y sistema (y no digo artificio), […]...