Yo soy tu rama verde porque tú eres mi surco.
Soy tuyo porque nada fuera de ti me llena,
Porque todas las cosas tienen su propio mundo
Y mi huraña semilla se fecunda en tu tierra.
Tú tienes la medida del viento que me impulsa
Y siempre me diriges con rumbo a tu salida.
Sediento peregrino detrás de tantas dudas,
Eres el agua viva de mi sed infinita.
Ya renuncié al camino por el que no he pasado
Yo, soñador de miles de adioses y de sendas.
No quiero más senderos que abrir en solitario;
Ven, desandemos juntos la vida que nos queda.
Mi libertad completa se escribe con tu nombre
Porque tu nombre encierra la paz que me libera.
Mujer, sumisa diosa que siempre me respondes,
Yo soy tu rama verde porque tú eres mi tierra.