Tu sagrado advenimiento
dio principio a nuestra vida,
y el virgen concebimiento,
con tu santo nacimiento
nos dio ley muy escogida.
Tu santa circuncisión
y el ofrecer de los Reyes,
tu muerte y resurreción
tu miraglosa acensión,
destruyó las falsas leyes;
y con tu recebimiento
se libró nuestra caýda,
y el virgen concebimiento
con tu santo nacimiento
nos dio ley muy escogida.
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