En el Talón de Aquiles podían clavarse las flechas enemigas, los
dardos y calumnias con que provee la inquina. Van Gogh mutiló su
oreja y nadie sabe si fue en el altercado con Gaugin una tarde de
hambruna y perros flacos. O si era una manera de decir: no se
requiere de la oreja para mirar un desquiciado girasol.
La pierna de Mariátegui no le impidió caminar hacia el futuro. De
Cervantes, la mano, a un tiempo sostenía la adarga y el lanzón,
ilusiones del hombre en la batalla. De Díaz Mirón era el brazo
enfurecido que manoteaba hacia el orto para alcanzar desnudo sus
reflejos de plomo. El de Orozco quería pintar incendios, el de Jesús
F. Contreras esculpía ese sueño malgré tout.
(1 votes, average: 5.00 out of 5)
Versos similares:
- La ventana me remite La ventana me remite a su coche, el coche al beso, el beso a la oreja que anda siempre perdiendo pendientes, la oreja a la […]...
- Canto (i) Dame, Señor, piedad para mí mismo Y que mi obra te responda. Francisco Cervantes Con la pesada llaga ya sin cuerda en el cuello Con […]...
- Las heridas Para Toño Cardenal En el año más crudo de la guerra Y en lo mejor de la batalla El combatiente llevándose a los ojos La […]...
- La apariciÓn del cometa No envidio la pluma de Cervantes, Ni del Argivo la sonora trompa, Ni el lauro de Colón por más que rompa Nuevos caminos a los […]...
- Divagaciones nocturnas i El tic tac infernal… Desgarra la muerte del día Emergen fantasmas Aúllan las bocas muertas Las inseguridades cabalgan Y atropellan la razón La distancia me […]...
- El hacedor de lluvias Hurgué en el más profundo cielo Los cirros como ovejas Le musité mi aliento Y acaricié en la húmeda cavidad hacia la altura De un […]...
- Travesía La vida y la muerte van De la mano, hacia el olvido Como riberas opuestas De un río. Por el río de la vida Viajamos […]...
- Amaneceres de noche Tu cuerpo dormido me lo dice todo, Como el mar de aquella tarde que no volví a ver. Y yo te miro como si te […]...
- Los hijos del trueno Quizá mañana cuando el sol se inserte en la piel seamos como dos potros indómitos y volvamos a caminar por estos lares abrazando, sin exabrupto […]...
- Xxxviii (lo callado del silencio) “Del aire te defendiste, El tiempo nunca pudo, Pero te rindes al agua.” Pedro Salinas Ricardo Haack. El tiempo llama Al tiempo Después de colocar […]...
- Imágenes I Perdido en ese túnel de sí mismo creyendo ver la luz en la luciérnaga y el infinito en la línea de la mano, llevando […]...
- Atardece. noticias desmienten Atardece. Noticias desmienten la calma frente a mi casa. Tristona y hermosa abre su bocadillo a desgana y parte en dos los escalones de la […]...
- Hacia tu corazón No existen los caminos Hacia tu corazón; Tampoco los atajos. Hacia tu corazón, Sin cuerpo ni memoria, Se va de un solo salto. La vida […]...
- Antonio machado Vi un ramito de violetas brotó el llanto Pensé en Darío agonizando en su Nicaragua natal Pensé en todos los herederos de Cervantes que no […]...
- Neblina y oro Mi abuela iba y venía por el andén lluvioso, sostenía en las manos una flor sin aroma, en su pecho la noche besaba una paloma. […]...
- El tiempo El tiempo; que con tiempo no he mirado El tiempo es vengador de mi apatía Bien me castiga el tiempo la porfía De haberme con […]...
- Poeta mortal a los poetas jóvenes (iii) el poeta sobrevive Si oyes ladrar los perros es señal que los ritos de Cervantes se acercan a tu grandeza de poeta sencillo. Por las dudas pon tu […]...
- Sobre los Ángeles A un niño, a un solo niño que iba para piedra nocturna, Para ángel indiferente de una escala sin cielo… Rafael Alberti Hubo ángeles con […]...
- Ardicia (iv) El sordo dios: la carcajada inmóvil. Murmullo de otra luz será tu fe. Aléjate de la expresión forzada o del silencio amilanado. Oye tan sólo […]...
- Memorial del adiós Voy a decir adiós Nunca lo dije Voy a decir adiós Lo estoy diciendo Todos los nunca llegan Adiós al tú que dije Al yo […]...
- RevÉs del asombro No hay tiempo en el instante del asombro, Sino el cruce tal vez de muchos tiempos, Baraja ensimismada en un abismo Con fondo en el […]...
- Yo me doy el lujo de volar en una alfombra Yo me doy el lujo de volar en una alfombra De palabras Yo me quedo los domingos horas enteras Frente a la Venus de Milo […]...
- Fuera de foco El toro de la primavera se me encima estoy en celo mi cuerpo untado de canela tiembla como una cabra blanca. entre tus piernas y […]...
- El cielo destruido (“¡Oh, cielo riguroso! ¡Oh, triste suerte! ¡Que tantas muertes das con una muerte!”) El cielo destruido porque llora Mi acongojado corazón humano, No es el […]...
- La navaja La navaja cortó una oreja Cortó otra. La lengua, los Pezones… y todas las partes De su cuerpo (todas esas así Salientes… que daban hacia […]...
- Símbolo Llega una mano de oro luciendo un diamante una mano de hierro gobernando unas riendas, una mano de niebla donde canta una alondra: yo las […]...
- A un corazón inconstante Aprendí a conocer a la inconstancia y a alargar el instante que me daba, fui viviendo a medida que llegaba el tiempo en el reloj: […]...
- De modo que cervantes era manco De modo que Cervantes era manco; sordo, Beethoven; Villon, ladrón; Góngora de tan loco andaba en zanco. ¿Y Proust? Desde luego, maricón. Negrero, sí, fue […]...
- Vio a cristo Vio a Cristo amamantando a los perros. Vio un hueco en el lugar del corazón. Vio una parva de heno, una oreja de Dumbo, una […]...
- Una rama como una cesta de paja mi mano blanca y su pulgar girando mi mano fina y oscura para tocarte cuando hacemos su juego en el […]...