Cuando risueño se levanta el día
Se agrava con las horas mi tormento
Y crece de continuo el sentimiento
Cuando cae la noche oscura y fría:
Lejos de la quietud y la alegría
Descanso busco, pero no lo siento.
Porque si es que reposo algún momento
Es cuando me desmaya la agonía.
Vuelve otra vez el día congojoso
Y me encuentra del modo que me deja.
Despierto sin alivio ni consuelo.
Tu, Roselia, procura mi reposo,
No renueves la causa de mi queja,
Haz por que mude de semblante el cielo.