Cogiendo va, y llevando al blanco seno
El apacible fruto deseado
Mi amada Ninfa en un hermoso prado
De varias hierbas olorosas lleno.
Unas cogió de suave olor, y ameno,
Otras de un gusto dulce, y extremado,
Mas con una encontró, que le ha amargado
Como si fuera un áspero veneno.
Contra las hierbas encendido en furia
Con el pie pisa, y con la mano arranca,
Que a la buena ni mala no reserva.
Mas sucedió, que por vengar su injuria
Del pie tocado, y de la mano blanca
Verdeció el prado, y floreció la hierba.