Alguna vez a su pesar levanto
De la antigua pasión al pensamiento,
Por ver si con el curso, y movimiento
Crece el tormento, o mengua tanto cuanto.
Y está tan hecho a su importuno llanto,
Cortado a su medida el sufrimiento,
Que no hay braveza de contrario viento,
Que en él engendre alteración, ni espanto:
Y es la razón, porque mis graves daños,
Tan en su punto la ocasión los puso,
Que no pueden crecer haciendo ofensa:
Menguar tampoco, porque en tantos años
Se han hecho naturales por el uso
La posesión gozando sin defensa.