Haciendo la figura d Cupido, en el baile intitulado: Amor en la Aldea
No es el Amor esa deidad hermosa
Que veis, como los céfiros, alada,
Con puntas de oro y dócil arco armada,
Y ceñida la sien de mirto y rosa.
O en breve sueño su inquietud reposa,
O el aire hiende, la prisión burlada;
Dulces afectos inspirar la agrada:
Triunfa, y castiga o premia generosa.
Esa es la Ninfa, por quien hoy ufano
Garona, ilustra su feliz ribera,
De pámpanos ornándose el cabello.
No es aquel ciego flechador tirano,
Que el mundo turba y la celeste esfera,
No es el Amor; que no es Amor tan bello.