mar de centellas antes de ser
se habían retirado las máscaras
en la nada yo planeaba
limpio sin destilarme
sin alma
los fantasmas de no ser atravesaban mi imaginar
en esa no ley
sentía polvo espiritual
Cerré mis párpados vacuos
y me soñé tablero de alfileres a vapor
y geómata del caos saltando átomos
en luz fui tatuándome
La cicatriz del ángel
hiló la lumba
ecos
de vos
y La Soledad fue devorándome
llamado de yemas inalcanzables
de lira eterna
Y hoy estoy venado en flor
leiéndome en fuentes
donde imagino ser yo
buzo de mis llagas celestes
el yang tsé
– rumora
cerezos de llanto
(Fragmento).