Para la amable señorita Teresa Aritzti
Hacia el ocaso fúlgido titila
El temblador lucero vespertino,
Y a lo lejos, se escucha del camino
El eco vago de lejana esquila.
Como escuadrón de caprichosa fila
Nubecillas de tono purpurino
Se desvellonan en celaje fino,
Etérea gasa, que disuelta oscila.
El rayo débil que las nubes dora,
Lentamente se extingue, agonizante,
Sus fulgores lanzando postrimeros;
Y la noche se apresta vencedora
A desceñir sobre el cenit triunfante
Su soberbia diadema de luceros.
(1 votes, average: 5.00 out of 5)
Versos similares:
- Quisiera estar solo en el sur Quizá mis lentos ojos no verán más el sur de ligeros paisajes dormidos en el aire, con cuerpos a la sombra de ramas como flores […]...
- El cielo Dijo Dios: “La gloria santa, que en mi derredor se agita, quiere una alfombra infinita donde reposar su planta.” Y dijo el mundo: “Ambiciono que, […]...
- El vuelo La tierra. Anhelo y gravedad, matrices del impulso. Génesis de las alas hacia otra densidad de la materia. Se eleva el cuerpo: espíritu acercándose a […]...
- El tren arranca lentamente El tren arranca lentamente…El pueblo viejo tiene en sus grandes casas, sucias y silenciosas, una opaca, doliente y suave claridad, perdido entre las gasas azules […]...
- Una luna creciente Una luna creciente cabalga entre mis piernas. En sus muslos se dora, corcel, el sol naciente. Que el marido paloma, la ciruela rotunda. Esta esposa […]...
- Maria de pacheco Aun flotaba, en la atmósfera sangrienta De los batidos campos de Castilla, El último suspiro de Padilla El último rumor de la tormenta. De muerte […]...
- Adiós De pesar una lágrima sentida No brote, no, de tus hermosos ojos: ¿Por qué llorar mi muerte si mi vida Era un erial de espinas […]...
- Acaba de salir, sagrada aurora Acaba de salir, sagrada aurora, Acaba de salir entre pintadas Nubes, que con sus luces regaladas El mismo campo reverdece y dora. Con tu amable […]...
- Viejo estribillo ¿Quién es esa sirena de la voz tan doliente, de las carnes tan blancas, de la trenza tan bruna? -Es un rayo de luna que […]...
- Cuando en la planta con afán cuidada Cuando en la planta con afán cuidada La fresca yema de un capullo asoma, Lentamente arrastrándose entre el césped, Le asalta el caracol y la […]...
- Una paloma en los ferries Lentamente, la paloma violenta anidó en el hombro derecho de la muchacha negra. Lentamente, una sonrisa de oro se hizo luz en los labios de […]...
- Horas He visto mi rostro He visto mis ojos En el acantilado de reflejos Subiendo por las grietas del árbol Y mi rostro y mis ojos […]...
- Indio CANTO A BOLÍVAR El trueno horrendo que en fragor revienta y sordo retumbando se dilata por la inflamada esfera al Dios anuncia que en el […]...
- Flor nueva de sansirolÉs iv Hace milenios Me enseñaron a escribir. Y hace una hora Aprendí a borrar. Proletarios del cénit, Leve lid el fonema....
- Siempre vuelve un rostro Siempre vuelve un rostro, siempre En el chubasco que cae repentino, en las Islas de las nubes. Silencioso se asoma un obscuro sol En las […]...
- Siete de la mañana Siete de la mañana, todavía no ha amanecido desfilan por las vacías calles los nacionales espectros. Atravieso el puente de la Avenida de la Libertad, […]...
- Mirar Veo otra ruta, la ruta del instante, la ruta de la atención, despierta, incisiva, ¡sagitaria! Pico de víscera, diamante extremo, halcón, ruta relámpago, ruta de […]...
- “tu retorno” Porque retornas mujer si ya no te sentía en mi Si ya mi corazón no latía a tu ritmo Si la vida sin ti ya […]...
- Las nubes Absorto contemplaba Las nubes desplazándose en el viento Las nubes eran grises, eran blancas Y otras gris, casi negro. También algunas nubes sonrosadas, Surgieron a […]...
- La nave Del mar de la vida las ondas en calma Cobra la luna con rayo fugaz, Y en el horizonte, cortando su curva, Descubre una nave, […]...
- La rosa Yo sé que estás aquí en mi mano te tengo, rosa fría. Desnudo el rayo débil del sol te alcanza. Hueles, emanas. ¿Desde dónde, trasunto […]...
- 4 (puntos de fuga) Pende sobre un suelo seco. Agotados ya el aire altísimo, La promesa de ventura, La luz del sol en el agua trémula, La hora del […]...
- Venturosa sala de espera Entornar la mirada hasta ver lo impensable, es crear. Diego Jesús Jiménez Nubes con vocación de desfile. Arrastran un espacio sin nombre. Nubes. Antes que […]...
- Tríptico azul I Hay mañanas en que bajas al río y te detienes a escuchar en la corriente la voz amorosa del mar. Quisieras volar, seguir el […]...
- Lluvia I Está lloviendo en toda la superficie del aire, Y es como el nacimiento de la muerte, Que ama envolverse en las olas de la […]...
- No cesará este rayo ¿No cesará este rayo? ¿No cesará este rayo que me habita el corazón de exasperadas fieras y de fraguas coléricas y herreras donde el metal […]...
- La palabra mÁs exacta El rayo inclinado se posa en la palabra más exacta Y de ella bebe y liba y evapora. De espaldas a la luz de la […]...
- La barca (Struggle for life: Combate por la vida) La aurora lucia tranquila en Oriente, La luz inundaba los montes y valles, Las flores abrían los pétalos […]...
- Por miedo La dejé marcharse sola… y, sin embargo, tenía para evitar mi agonía la piedad de una pistola. “¿Por qué no morir? – pensé- ¿Por qué […]...
- Mirando un incendio Subes, oh llama, con veloz carrera De estos cansados leños desatada, Solicitando en humos transformada El distante reposo de tu esfera; Pero al subir por […]...