Eras jardín de naranjas.
Huerta de mares abiertos.
Tiemblo de olivas y de pámpanos,
los verdes cuernos.
Con pólvora te regaron.
Y fuiste toro de fuego.
(1 votes, average: 5.00 out of 5)
Versos similares:
- Como el toro he nacido para el luto Como el toro he nacido para el luto y el dolor, como el toro estoy marcado por un hierro infernal en el costado y por […]...
- Toro en el mar (4) Le están dando a ese toro pastos amargos, yerba con sustancia de muertos, negra hiel y clara sangre ingenua de soldado. ¡Ay, qué mala comida […]...
- Toro en el mar (29) Cornearás aún y más que nunca, desdoblando los campos de tu frente, y salpicando valles y laderas te elevarás de nuevo toro verde. Las aldeas […]...
- Letanía de la huerta Huerta de los repollos, huerta del jiló huerta de la lectura, huerta del pecado, huerta de la evasión, huerta del remordimiento, huerta del escaramujo y […]...
- Infancia mía en el jardín… (elegía) Infancia mía en el jardín: Las cochinillas de humedad, las mariquitas de San Antón, también vagaba la lombriz y patinaba el caracol. Infancia mía en […]...
- El madrigal de los ojos verdes De verdes varios, tallada en mil facetas, la huerta, el bello paisaje amado que nuestra dicha contempla. Verde el agua en los regajos, en el […]...
- Toro de tierra A Edel Hay un toro de tierra extraviado dentro de cada uno de nosotros. A solas, sin descanso, sin manada, recorre el laberinto de las […]...
- Elegía nocturna Quién nos hubiera dicho… Que todo acabaría como acaba en la sombra la claridad del día. Fuiste como la lluvia cayendo sobre un río para […]...
- Toro en el mar (19) (muelle del reloj) A través de la niebla caporal de tabaco miro al río de Francia moviendo escombros tristes, arrastrando ruinas por el pesado verde ricino de sus […]...
- Tríptico, hombre y toro I El pañuelo rompe el aire como difunto conmovido o cuchillo, y anuda su miedo; La muerte y la duda, el hombre que cabalga sobre […]...
- La cerviz indomable del toro La cerviz indomable del toro ata Con las coyundas de su yugo grave El labrador, y brama, porque sabe Que su preciosa libertad maltrata. Al […]...
- Don luis de ulloa, que enamorado se ausentó de toro Generoso esplendor, sino luciente, No sólo es ya de cuanto el Duero baña Toro, mas del Zodíaco de España, Y gloria vos de su murada […]...
- Elegía a celia Celia de Cuba, mujer De ascendencia universal, Azúcar sobre la sal Del presente y del ayer. ¡Cuánto daría por ver En vuelo a un ángel […]...
- Tu nombre sobre el muro Para el nombre y el hombre Paul Eluard. Para el hombre infinito que Vivió en él. Para la vida sin término Que vive en su […]...
- Elegía del niño marinero A Manuel Ruiz Castillo. Marinerito delgado, Luis Gonzaga de la mar, ¡qué fresco era tu pescado, acabado de pescar! Te fuiste, marinerito, en una noche […]...
- Retorcedme sobre el mar Retorcedme sobre el mar, al sol, como si mi cuerpo fuera el jirón de una vela. Exprimid toda mi sangre. Tended a secar mi vida […]...
- Mapa con una piedra Aquí queda el océano: los pesqueros que abandonó Somoza. Aquí, la costa: el algodón, bananos, caña de azúcar, caucho, cacao, ganado y paludismo. Mas acá, […]...
- A una mujer que ponía los cuernos al conde Letra: Lágrimas de embuste más me endurecen, pues regados con ellas mis cuernos crecen. Glosa: Niña del negro cabello y de muchos corazones, lloras los […]...
- Naranjas Naranjas que caían al corral de mi casa de una casa vecina, rodando por las tapias… Encendidas naranjas que trae, en su canasta, una niña […]...
- Sobre el volcan de taal El aire matinal con tenue halago Riza el cristal apenas; en el lago La montaña reposa; el cráter ciego No guarda ya memoria de su […]...
- Sobre el poder del tiempo Todo lo muda el tiempo, Filis mía, todo cede al rigor de sus guadañas; ya transforma los valles en montañas, ya pone un campo donde […]...
- Toro en el mar (15) El soldado soñaba, aquel soldado de tierra adentro, oscuro: – Si ganamos, la llevaré a que mire los naranjos, a que toque la mar, que […]...
- Casa sobre tu pecho I A medio otoño, casi del olvido volviendo con la rosa del verano; el mar del corazón bajo tu mano y el camino de ayer […]...
- El fuego perdido (i) Esta señal de la aurora la traían en su corazón Popl Vuh III, cap. VI No podemos encender la hoguera Mojado está el bosque podridos […]...
- Mesa y naranjas Las líneas de la mesa interrumpidas por naranjas dispuestas en un plano sobre la luz del cuarto blanco abajo el mar se tiende bajo la […]...
- Mapa del caminante (Homenaje a André Bretón) Ha llegado, de nuevo, El poblador de las estaciones anfibias /del sueño, El caminante de una Babel de espejos. Alguien lo […]...
- El mapa de la felicidad El mapa de la felicidad es cualquier Parte Tu mano ecuatorial es la partida Si tú caminas conmigo Puedo fundar rosas con mi pie Puedo […]...
- Elegía a ernest hemingway Los que arrastramos un pescado, o una vaca negra, como el Viejo Amargo del Mar de las Antillas, los que apacentamos una gran culebra por […]...
- Eramos jóvenes …si tú te mantienes libre, por tu imposible yo, tú por mi imposible. Juan Ramón Jiménez Aún recuerdo cuando te encontré. Eras el nombre que […]...
- El piloto perdido ¡Torrero, que voy perdido y está apagado tu faro! Noroeste. Nada claro por el cielo, ¡y te has dormido! ¡Que se ha dormido el torrero […]...