“Te molesta mi amor
Mi amor sin antifaz
Y mi amor es un arte de paz.”
Silvio Rodríguez
Tengo los nervios tendidos
Sobre tu piel
Y la gana de ver tu sonrisa
Cercana, visible y diáfana
Para iluminar mi sombra.
Hay ventanas esquizofrénicas derramándose
Sobre los senderos de mis manos,
Rechinando entre mi andar,
Procurando mi caída
Dentro del sorbo de un conjuro
Sombrío, funesto, nefasto que de dientes se adueña.
Hoy te miro así, lejana,
Gaviota que adorna mis lágrimas
Para hacer de mis ojos
Su alimento.
Pero te escucho como el rugido de las olas
De mi anhelo pasado, quedado en tu olvido,
Traído de nuevo por mi capricho: latir del corazón.
Mañana serás refugio cetáceo de prueba divina,
Abrigo de mi garganta
Y estela desinfectante de rencores.
Entonces yo seré corriente de mar
Dentro de tu canto
Para levantar ciclones con tu latir.
Entonces, el arrecife será espuma
Para limpiar las mundicias de quienes,
De los peces su vida hacen
Y mueren con el asombro
Atravesando su boca.
Tengo los nervios tendidos
Sobre tu piel
Y tu sonrisa mis labios revive,
La sombra se aleja y mis nervios
Ahora son parte de tu piel.