Son las dos de la madrugada de un lunes cualquiera
Hace treinta y dos años en la calle Tres Arroyos
un inesperado crimen nos recordaba que también
se mata por pasión.
Las crónicas oficiales sólo reseñaron
los celos enfermizos del autor de la tragedia
pero nada dijeron de la consternada Laura
la desdichada enfermera que aceptó consumar
aquel ritual con su despiadado amante.
¿Quién fue la víctima y quién el victimario
en la gélida noche del 4 de julio?
¿Qué se perdió en esa nocturna ceremonia
pactada de antemano?
Los cuerpos de ambos tomaron rumbos distintos
pero nada diferencia a una cárcel de un morgue.
Tal vez ella repose en paz junto a sus muertos
quizá él todavía continúe atormentado
por la traición de esos labios que tanto deseaba.
Debe ser verdad aquello de que el amor y la muerte
tienen un mismo destino.
Versos similares:
- Un crimen I.- Hubo un tiempo en que atónito miraba A una joven, que ardiente idolatraba, Modelo de beldad. “Te adoro, te idolatro”, me decía; Y en […]...
- Poema de una calle Amo esta calle triste y amo sus tristes casas, En las que se entristecen cumpleaños y bodas, Porque esta calle triste se Alegra cuando pasas, […]...
- Tres grados de lo inefable Un día desperté y estaba hecha parque. Yo me vi con mi sangre pero parque. Imposible mostrar. Pero tanta luz…. Dividiendo por veintiocho muchas frondosidades […]...
- La calle del niÑo perdido Al rayar de una mañana Serena, apacible y pura, Cuando el alba su hermosura Envuelve en manto de grana, Cuando entre vivos fulgores Y entre […]...
- Historia de un día en tres esquelas I Vergüenza me cuesta, pero has de perdonarme. Hoy no asistiré a la Junta. El motivo es pecaminoso. Justamente de cinco a siete tengo que […]...
- Calle de la estrella Convertiré mi aldea en santuario donde el anciano que seré dirá sus últimas palabras que éstas sueñan entre bardas, garberas, olmos secos, eras que ya […]...
- Salimos a la calle Salimos a la calle, caminamos bajo la llovizna, entramos en un bar, bebemos, compramos una pizza, la envolvemos, se enfría, la tiramos, seguimos malecón abajo, […]...
- Los tres deseos Lo que escucho de tus labios Es solo para mis oídos La fragancia de tu cuerpo Solo puedo poseerla Mientras me habitas Las caricias Las […]...
- O, tres y quatro vezes venturosa ¡O, tres y quatro vezes venturosa, Aquella edad dorada, Que de sencilla, pura y no inuidiosa, Vino a ser inuidiada! Sobre la bien nacida yerua […]...
- Dos por la calle Quizás nunca sepamos el nombre de aquel perro ni a dónde dirige sus ojos Quizás el cansancio de sol duela más hondo en la sedienta […]...
- Los tres esposos de la noche Negra cabellera enamorada Borges Habla la leyenda de una mujer morena apetecida, Noche. Seduce los espíritus Con sus joyas profundas y brillantes. Innumerables son los […]...
- Calle del arrabal Se me quedó en lo hondo Una visión tan clara, Que tengo que entornar los ojos cuando Pretendo recordarla. A un lado, hay un calvero […]...
- En la calle, yo me halle de tu talle EN LA CALLE, YO ME HALLE DE TU TALLE Bella calle, En ti me halle De tu talle. Que cada huella De los pasos, Como […]...
- Unos pasos atraviesan la calle Unos pasos atraviesan la calle, (¿a dónde irán?), y tú vagas tras ellos, Imaginas la vida presurosa Que se pierde en la sombra. La vida […]...
- Treinta y tres La edad del cristo azul se me acongoja porque Mahoma me sigue tiñendo verde el espíritu y la carne roja y los talla, el beduino […]...
- Chau número tres Te dejo con tu vida tu trabajo tu gente con tus puestas de sol y tus amaneceres. Sembrando tu confianza te dejo junto al mundo […]...
- La historia de los tres reyes magos Introducción Dicho tu primer tormento, ¡o nuestro claro miralle!, aquel alto adoramiento, aquel sabio ofresçimiento no está razón que se calle, que los tres reys […]...
- Pero un día se supo que tres veces el crepúsculo Pero un día se supo que tres veces el crepúsculo Veces el equilibrio de la maternidad Tres la continuación de nuestro territorio Sobre la superficie […]...
- Soneto (de félix arvers) Nadie conoce mi amor secreto: No lo conoce ni quien lo inspira; Y es tan humilde que a nada aspira, Pues su constancia no tiene […]...
- Del mancebo que se quería casar con tres mujeres Era un garçón loco, mançebo bien valiente, non quería cassarse con una solamente, sinon con tres mugeres: tal era su talente; porfiaron en cabo con […]...
- En la mesa de tres patas En la mesa de tres patas enfilaban los “tintos” La muerte giraba con ojos de lechuza y yo bailaba al compás de palmas que rasgaban […]...
- Baladilla de los tres puÑales He comprado tres puñales para que me des la muerte… El primero, indiferencia, sonrisa que va y que viene y que se adentra en la […]...
- Tres años ha, mi dios Tres años ha, mi Dios, que las impías Persecuciones ocasionan llantos, Y en sus profetas y ministros santos La crueldad ejecuta tiranías. Tres años ha […]...
- A los tres aÑos y miedo Eva improvisa un castillo de arena Con una fiambrera. Ahora todo le vale. Le prepara viajes a sus muñecos En los zapatos monovolumen de su […]...
- Tres canciones (i) Puente de mi soledad: con las aguas de mi muerte tus ojos se calmarán. Tengo mi cuerpo tan lleno de lo que falta a mi […]...
- Recordando a teresa a Teresa M. de Bassús Ella era en mí y yo en mí y en ella mitad de una simbiosis entre impaciente y necesaria. Ella […]...
- Carta a los tres magos de oriente Trazas de angustia, un rayo de dolor, Una veta de rabia, de locura, Y un cielo de ilusión hecha aventura Para dar a las alas […]...
- La niña escapa en tres venados hacia el fuego La niña escapa en tres venados hacia el fuego, no la sueñes junto a esas márgenes celestes. Tú habías esperado su llovizna, navegabas ya en […]...
- Tres improvisaciones para una tarde de sÁbado I Un sábado de verano y vuelvo a este ojo, mi casa, la montaña dormitando afuera. Escucho al segundero arrítmico de una mosca contra el […]...
- Tu inmateria en la selva de concreto (tres poemas) Ciudad luciérnagas lejanas esta noche tu inmateria vagará entre esa fila de hormigas si fuera pasajero de tu pensamiento sentirías mis alfileres mis temblores hasta […]...