Anoche hicimos el amor.
Cruzamos fronteras
Y sin temor viajamos por otros países.
Con ramilletes de besos
Nos acogidos mutuamente como héroes
Que no han conquistado a nadie.
Implosiones de éxtasis por todas partes
Y respiramos como uno solo.
Sin temor, desnudos,
Acurrucados el uno en los brazos del otro,
Dormimos y soñamos.
Esta noche a la guerra.
Los hombres con sus máquinas se desplazan.
Los tanques ruedan sobre la carne pedrogosa de la arena
Los francotiradores apuntan,
Los dedos acarician gatillos bien aceitados
Y el éxtasis de esta noche
Está a un pelito de la mira de los fusiles.
La matanza se hace mejor en la noche
Cuando los sentidos son más agudos
Y la imaginación es más nítida
Para conjurar terror en las sombras
Que proyecta la lírica luna
Ululantes humanos predadores
Están hundiendo sus garras manufacturadas
En su propia especie.
Amor, la luz del día muestra
Que las esquirlas abrieron hoyos en los rostros,
Haciendo brotar sangre
Evaporando el vapor de la vida
Desde el lugar que ocupaba el estómago.
El sol brillante
Se levanta
Desde los ojos quemado de lo muertos.