Te quiero porque lloras entre agujas de acero.
Y tejes sin descanso
Como Ulises quisiera que fuera su bufanda.
Porque me miras entrelazando grises.
Y sabes que te espero sentada al otro lado
De una mesa de mármol donde apuras certezas
Que nunca beberemos las dos juntas.
Que eres esa Penélope que devana sus dudas
Entregando su risa a manos llenas
Para que nadie sepa que aguardas lo imposible.
(1 votes, average: 5.00 out of 5)
Versos similares:
- Soneto (a claudia lars) Ahora que padeces por la espina que tenías clavada entre la rosa de tu vida de niña prodigiosa y sabes la verdad que se avecina. […]...
- El amor Si eres un bien arrebatado al cielo ¿Por qué las dudas, el gemido, el llanto, la desconfianza, el torcedor quebranto, las turbias noches de febril […]...
- Al conde de niebla, don manuel alonso pérez de guzmán el bueno Si diere lugar mi llanto, Que, en mis esquivos enojos, El ocio quitó a mis ojos Y el ocio le dio a mi canto, Osara, […]...
- Claudia Con hermana y cuñado veranea En quinta señoril, sobre un ribazo, Asiento y gracia de salubre aldea. Y no para en el rústico regazo; Y […]...
- Yo soy tu rama verde Yo soy tu rama verde porque tú eres mi surco. Soy tuyo porque nada fuera de ti me llena, Porque todas las cosas tienen su […]...
- A la soledad de la muerte Una tristeza oscura se deshace en mi cuerpo Cansado de ser tierra sobre tierra. Y a veces, Un otoño de sueños caídos como hojas Navegan […]...
- Corazón coraza Porque te tengo y no Porque te pienso Porque la noche está de ojos abiertos Porque la noche pasa y digo amor Porque has venido […]...
- Ángel de la poesÍa Porque respiro el aire que respiras. Porque percibo tu vagar intenso. Porque escindes de lo vulgar mi alma. Porque me acercas a tu sacro fuego. […]...
- A rocío cano Te quiero porque aprendo contigo a ser distinta. A sonreír de pronto Cuando me miras detrás de los paisajes Que inventas para mí cada mañana. […]...
- Cielo sin recorrido Cielo sin recorrido, tierra áspera, voz infusa, dilatoria, Pueblo taciturno que aviva su fuego entre mis cejas, Madre de noche sanguínea, En lo inamovible Sobre […]...
- Te amo más que a la natualeza r Te amo más que a la natualeza r Te amo más que a la natualeza a Porque eres la naturalez en sí. r Te […]...
- Tan sencillo este amor Tan sencillo este amor, tan luminoso, y tú no aciertas nunca a saber de verdad lo que me pasa. Lo que me pasa, amor, es […]...
- Declaración de amor Porque te cansas de estar sola, de encontrar en tu cama la sombra de la noche anterior. Porque te mueres de mirar las parejas d […]...
- El retorno Las paredes tienen oídos, vientre y sangre. Pero que no lo sepa el aire, que lo ignoren el invierno y el vendedor de esponjas; que […]...
- Lo más difícil de contar No encuentro resignación en la fe, ni en la alegría de los alimentos litúrgicos. Morirse es fácil y lamentar lo inevitable puede ser una banalidad […]...
- Nunca NUNCA hice daño a nadie -que yo sepa-; Ni me importó la vida De los otros. Si me pidieron algo abrí Los brazos. Me equivoqué […]...
- Orgullo Ignorante eres al decir que mi pluma, Si se yergue no es más que un filazo El que da y luego se agazapa; ella es […]...
- Poema de la espera Yo sé que tú eres de otro y a pesar de eso espero. Y espero sonriente porque yo sé que un día como en amor, […]...
- Invisible La muerte está esperándome Ella sabe en qué invierno Aunque yo no lo sepa Por eso entre ella y yo Levanto barricadas Arrimo sacrificios Renazco […]...
- Pasión de clandestino De aquellas arduas clandestinidades tenazmente debidas a causas nobles y amorosos lances, sólo te queda un sedimento entre feliz y melancólico, la sensación de haber […]...
- A gonzalo m. escarpa Te quiero porque un día aventuraste, loco, La posibilidad de hacer tú solo de colores un arco Y encima de la mesa me colocaste un […]...
- Mía Mujer soñada: Ya tú eres mía… Ya tú eres mía, como las rosas Son del rosal, y el Sol, del día… Todos los seres, todas […]...
- Arnoldo toribio En el patio del Centro de Rehabilitación Gaspar García Laviana no había nadie, y cuando empezamos a hablar sobre el pasado me dijiste de la […]...
- Mujer-mujer Nunca serás de nido ni de rama. Siempre serás de sol y desafío. Inquieta y vertical como la llama, Desde la fiebre de tu pulso […]...
- Cuestionario Aquí donde he crecido cargando mis piedrecitas de conciencia y falsa valentía los niños me preguntan por la historia. Hablan de tumbas y desconocidos de […]...
- Fulgor y piÉlago Era extraño el resplandor en la noche de palmeras doradas, el salitre acariciaba las fosas, exacerbando sonidos antiguos. Los ojos contemplan, a distancia, efectos tridimensionales […]...
- Es droga la elocuencia Esta rabia de diván, esta rabia milenaria que vino a perder su fuerza en la tribuna de un diván, no la enmiendan alaridos, no se […]...
- A dónde estás querube ¿A dónde estás querube? ¿A dónde estás querube? No te has ido porque tu viento miro en los follajes en el cielo perdido de mi […]...
- Soleariyas Llorando, llorando, nochecita oscura, por aquel camino la andaba buscando. Conmigo no vengas… Que la suerte mía por malitos pasos, gitana me lleva. ¡Mare del […]...
- Con abismada transparencia Eres el fuego del inicio. Eres la luz en el instante sabio de hacinarse en el agua. Eres la voz, la transparencia que penetra, que […]...