También sucede

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1. Soneto xviii Si a vuestra voluntad yo soy de cera, y por sol tengo sólo vuestra vista, la cual a quien no inflama o no conquista con […]...
2. Sucede que a veces Sucede que a veces pienso en ti y entonces como un huesecillo de cereza atascado vivo e imposible siento cuanto me quemas la garganta (Poema […]...
3. La basura también “Minador falleció al ser sepultado por una montaña de basura”. – (“El Comercio”, Octubre/71 ). Con las imperturbables quijadas de la lluvia, con la piel […]...
4. MaÑana de otoÑo Mañana otoñal De viejas memorias Bellezas y glorias En sin fin manantial De amarilla hermosura Que el viento produce Y en minutos reduce A un […]...
5. Contagio Tú contaminaste mis venas de hombre -virus a la inversa de vida y amor-. Fueron transparentes todas mis cortinas Al sentir tu sol. Cuando tú […]...
6. También existe También existe eso otro largas temporadas en el infierno sin saber dónde se encuentra me encuentro nos encontramos y allí soy asesino jesucristo judas iscariote […]...
7. También mueren caballos en combate También mueren caballos en combate, y lo hacen lentamente, pues reciben flechazos imprecisos. Se desangran con un noble y callado sufrimiento. De sus ojos inmóviles […]...
8. Toma también mis ojos Toma también mis ojos, la decisión de fecha escurridiza y llévame a aprender tierra de nadie o inciertas geografías. Toma el camino túnel o imán […]...
9. También de amor debe hablar el poeta (2) Llegas a mí como una brisa sin paisaje a nacer en aquello que emerge de la herida allí donde ya no es posible establecer un […]...
10. También de amor debe hablar el poeta (8) Mientras tu carne envejece te has quedado fija padeciendo el goce de una eterna Anunciación Tú haces que en el cielo formen los pájaros la […]...
11. Copa en mano tambiÉn pregunto a la luna ¿Un segundo de túnel hasta cruzar hacia dónde, hacia cuál mentira ahora con los mercenarios del ‘ismo’? ¿O habrá alguna nueva cantaleta para seguir soñándose […]...
12. La droga La más inofensiva, la más sana, la que nunca produjo salpullido a nadie; la que hasta ahora que yo sepa a nadie le ha pasmado […]...
13. Fiebre No tengo ni el derecho de decirte Lo que decir no debo, Pero escucha el relato de esta fiebre Desde un desahucio interno: Hasta el […]...
14. A un caballero de la casa del duque de híjar, que trajo un francolín al autor de parte de la duquesa doña estefanía, siendo dama Si es cosa cierta, señor, Que suelto el francolín canta, Y le añuda la garganta La vista del cazador; Por retrato de mi amor La […]...
15. Alegato Fueron días de fiebre y noches de abstinencia Con un lucro de sueños sin ganar ni perder; Melancólicas ráfagas soplaban tenazmente La bujía pigmea del […]...
16. Un deseo Un deseo de ríos y palmeras Me tiembla entre los dedos Enredándose En la voz del tiempo Tan cansado Que va nombrando las calles Donde […]...
17. Alondras que mueren deslumbradas (i) carne de la fiebre Carne de la fiebre diminuta donde el rencor olvida, tierra al fin donde medra el regocijo austero del amor, cien veces herida por la eternidad, […]...
18. El rito de amarte que me arrastra A veces me despierta una amapola A veces me horada una campana A veces me lava la cara una ventana Y otras veces me encierra […]...
19. Miro un brusco tropel de raíles Miro un brusco tropel de raíles Son del ingenio Sus soportes de verde aborigen Son del ingenio Y las mansas montañas de origen Son del […]...
20. A veces Días como lotes baldíos. Altas tapias para proteger tan poca cosa: hierbas, largas horas, escombros. A veces risas que llegan desde lejos sin un rostro. […]...
21. Racimos ya cuajados rompen vedas Racimos ya cuajados rompen vedas forestas dando salvas cazadores codorniz en ventana ¡dormidores! acogedla en los cotos de las sedas. ¡Plumas infaustas viento no las […]...
22. Estas ventanas atroces Estas ventanas, amor Con el múltiple beso de la lluvia Mordiéndolas con desesperada impotencia Amor, esta mañana Se enhebra por mis venas Como el olor […]...
23. Mi primer bikini Sólo yo sé cuándo sobrevivimos. Lo sé porque mis dedos se transforman en lápices de colores. Lo sé porque con ellos dibujo en las paredes […]...
24. Resumen No era el amor Aquel anhelo inalcanzable De las primeras novias desabridas Que mi pincel poético idealizaba en ángeles. No era el amor aquella cosa […]...
25. Nos acordaremos todos Lo que duele es aquí y es de maíz cascado pienso en mi madre que tenía una banderita pasó por esta casa fulgurante pasó por […]...
26. Siempre Porque te llevo bien metida en mis entrañas y porque con mis ojos y con mi luz te alumbras, porque pende tu vida de un […]...
27. Ya que de ti carezco Ya que de ti carezco, dueña mía, a quien el Sol es corta, oscura esfera, mi pensamiento y mi ansia verdadera en víctima te ofrece […]...
28. Grande es el odio (2) Y el miedo es una cosa grande como el odio. El miedo hace existir a la tarántula, la vuelve cosa digna de respeto, la embellece […]...
29. El retorno Las paredes tienen oídos, vientre y sangre. Pero que no lo sepa el aire, que lo ignoren el invierno y el vendedor de esponjas; que […]...
30. No basta el mal a siempre fatigarme ¿No basta el mal a siempre fatigarme, sin que también el bien me dé tormento? Yo’stava ya conmigo en buen asiento, para cuanto dolor quisiesen […]...