Volverse han muchos a labranzas toscas,
Que fueron sus primeros ejercicios;
Tratarán los magnates y patricios
En rubias mieses y vacadas hoscas.
Dejarán las culebras ya sus roscas
En que enlazaban huéspedes novicios;
Andarán los casados en sus quicios,
Pues le dejan en paz su miel las moscas.
Viviráse con gusto y más sin arte,
Y cesará el hablar por cartapacio,
Engomar el copete y frente lucia,
Y las mohatras en igual descarte.
En faltando la Corte, Rey, Palacio,
Aunque limpia, Madrid será muy sucia.