Quiero leerte este poema negro
Escrito con diez burdas puñaladas
Con el puñal por dentro de mi pecho,
Tallándome tu nombre en las entrañas.
Quiero leerte este poema rojo
Fraguado con deseo incandescente,
Que abrasa hasta el papel cuando lo anoto
De tanto consentir lo que consiente.
Quiero leerte este poema verde
Que encierra la frescura de una selva
Donde somos dos fieras que se pierden
Para que la lujuria las envuelva.
Y por si fuera poco, aquí lo dejo
Pintado con mi sangre en tu barranco:
Bendita celadora de mi cuerpo,
Para ti escribo este poema blanco.
(1 votes, average: 5.00 out of 5)
Versos similares:
- Poema divergente Tu soledad madura, Mi soledad abierta. -Donde tú estás, no quiero Y a donde voy no llegas-. Tu soledad activa, Mi soledad despierta. -Ni deseas […]...
- Poema x (de magnolia) Este melón es una rosa, Este perfuma como una rosa, Adentro debe tener un ángel Con el corazón y la cintura siempre en llamas. Este […]...
- Antes de escribir el poema Antes de escribir el poema, con el lápiz en la mano y el silencio hecho palabra, me pregunto a quién demonios interesa si este mar […]...
- El poema de los cuerpos Ved el poema de los cuerpos De los dioses que se aman; Cómo se encajan y completan En sus recodos secretos, La posesión carnal De […]...
- El poema de hierro Dame un poema de hierro que restalle sobre las vacías cabezas Y una mano firme en la muesca de la antorcha, Un poema de sangre […]...
- El cielo aquel pintado con tizas de colores El cielo aquel pintado con tizas de colores; el sol que se empozaba tantos jueves para los largos temporales “Cuando se empoza el sol en […]...
- El poema y el poeta Tú me pides un poema y yo te digo: amor, si tú lo eres. Cada parte tuya es una estrofa y todo el conjunto, poesía. […]...
- Mi poema de abril Picoteando la cáscara de algún viejo recuerdo con la lluvia de Abril nacerá mi poema le pondré mil colores los más puros y claros una […]...
- Cuando llueve tu poema A Felipe Granados Hay algo en tu poema que me hace leerlo antes de dormir repetirlo al cruzar los parques y soltarlo por el mundo […]...
- Te quiero Tus manos son mi caricia Mis acordes cotidianos Te quiero porque tus manos Trabajan por la justicia si te quiero es porque sos mi amor […]...
- Poema a pie Qué actitud, qué gallarda pose original se puede tomar Ante la proximidad de este poema? Te lo pregunto a ti, oh hábil diseñadora de nuevas […]...
- Cuatro cantos de mi tierra A Noé de la Flor Casanova I Tabasco en sangre madura y en mi su poder sangró. Agua y tierra el sol se jura; y […]...
- Colores en el polvo Si vuelven aquellos días En que la madrugada era Un frasco de estrellas De balas rápidas De gente apedreando carteles De lágrimas cristalizadas y Dientes […]...
- Deja colores del suelo Deja colores del suelo Para dibujar su frente Y tome el pincel valiente Lo más sereno del cielo; Tu cuidado y tu desvelo De la […]...
- Poema del fracaso Mi corazón, un día, tuvo un ansia suprema, que aún hoy lo embriaga cual lo embriagara ayer; Quería aprisionar un alma en un poema, y […]...
- Necesidad Este absurdo poema – lo presiento – Va a terminar en nada. Es un vacío Crepuscular que surge de mi hastío, La reverberación del descontento. […]...
- El poema que no digo El poema que no digo, el que no merezco. Miedo de ser dos camino del espejo: alguien en mí dormido me come y me bebe....
- Poema vulgar La vi pasar con otro… Su semblante Resplandecía de felicidad. Y me subió a los labios mi sonrisa galante, Con algo de impotencia y algo […]...
- Y esto no es un poema Es sólo lodo luminoso Que no quiere ser piedra Masa húmeda y brillante Que se levanta sobre Planicies y desiertos. No es poema Apenas barro […]...
- El poema es un cubo de granito El poema es un cubo de granito, Mal tallado, rugoso, insaciable. Raspo con él la piel y la negra pupila, Y sé que por delante […]...
- Marcha, pues, y en arneses y en colores Marcha, pues, y en arneses y en colores es su campo acerada primavera. Vence siempre al pasar, como a las flores vence el arado en […]...
- Cuatro boleros maroqueros 1.- Con las últimas lluvias te largaste y entonces yo creí que para la casa mas aburrida del suburbio no habrian primaveras ni otoños ni […]...
- Epigramas a angélica (cuatro epigramas) MANUSCRITO ENCONTRADO EN EL MONTE PÚBICO DE ANGÉLICA “No te lamentes ni rezongues, Angélica, que en este diario heroísmo de empuñar entre tus piernas esta […]...
- No somos poetas Somos apenas amantes Suicidas con la cuerda En la mano Caminantes de antes Usurpadores de abecedarios. No somos poetas Somos adivinadores De oscuras cavernas Transeúntes […]...
- Uno escribe un poema En el agujero del silencio O sobre la algarabía descuidada infantil, Encontré un árbol solo con flor rosada Abriendo su caudal sobre la acera: Tenía […]...
- Poema del numero cero Cuando la muerte señala la fibra luminosa que somos, Cómo tiembla su luz, cómo parpadea con el viento repentino, Cómo se aterra al pensar en […]...
- InscripciÓn en un crÁneo Página en que la esfinge de la muerte con su enigma de sombrea nos provoca: ¿Cómo poderte descifrar, si es poca toda la luz del […]...
- Son cuatro inviernos Son cuatro inviernos de agonía hermana. De amanecer el corazón abierto. Quisiera ser, pero el futuro incierto me ensombrece la senda del mañana. Cuatro años […]...
- Quiero huir de todo, eso es todo No busco por la geografía del poema Una palabra especial como una mina No quiero fundar una ciudad de palomas No quiero establecer la boca […]...
- Cuatro ojos No veo las piedras son chanchos Desembocadura del Aconcagua bote En el río en el mar en las rocas en la playa Puesta de sol […]...