Grave son de alegría, el violonchelo
Pasa lento en el alma, y en ella vibra:
Murmuremos entonces al cuerpo doble,
A las bocas y manos, a los desmayos,
A las secretas búsquedas que no temen
Ni vergüenza, ni dolor, ni la verdad:
Esto es amor, un arco de alegría
Sobre la cuerda tensa del orgasmo.