Ese olor a leopardo joven
Sudado
Me sabe a cielo
De verdad
Ese sabor salado y sabrosón
Picante
Me huele a Givenchy, del más caro
Palabra
Ese ruido así como de
Alma en pena
Me raspa, me roza
Me acaricia la entrepierna
Como un tigre viejo
Sabio y con todavía no
Poco escaso colmillo
Carnicero
Y esa zarpa tuya
Que se desliza por mi espalda
Va dejando una huella
Musical,
Una sinfonía de selva ardiente en
Sol mayor
Oscura y
Húmeda
Que día a día
Me va convirtiendo en
Costra
De pies a cabeza