Desplegó la noche su encanto solitario
Y anduvieron marineros
Con la cara de luna
Bebiéndose hasta la última tristeza,
Cantaron himnos de piratas,
Recordaron tormentas y mujeres,
Sobre todo mujeres.
El viento se llevó las voces,
Las botellas rodaron hasta el mar,
Barco vacío, brújula sin norte
Y norte sin sentido.
Cálidas lejanías
Brotan desde la calma y el silencio
Mientras los sueños duelen en la mente,
La fantasía desemboca
En un muelle imaginario
Donde no los espera
La sombra que no llaman, pero viene.