Los sicarios apuntaron a la maleza al son dado
Vuelta entre convulsiones de vencida sustancia
Por las averías del bosque algunas historias
Cobraban plumas gorjeos destinos y se suspendían
Hacia leves aduanas inciertas
Pretendíase la voz erecta aquel soplo
Que burló al abrazo de interminables vallas
Apuntaron al supuesto mal un cofre desfondado y otro
Y otros más en anulada carne
Que la sutura lunar unía con siluetas cabizbajas
Despiadadas municiones conocieron
Después había brotado el rojo
Relato escondido del ocaso