Tomás, aquí en tu casa contigo al fin converso.
Ya no me abres los brazos, amigo, en el umbral.
Ya sólo puedo ahora decirle al mar tu verso:
A este mar que lo ha ungido con su yodo y su sal.
Versos similares:
- Señor, ahora que mi piel Señor, ahora que mi piel y la suya -después de las sábanas- han formado un nuevo “collage” en el agua, no es el mejor momento […]...
- Aquella tarde Aquella tarde, al decirle que me alejaba del pueblo, me miró triste, muy triste, vagamente sonriendo. Me dijo: ¿Por qué te vas? Le dije: Porque […]...
- Reyerta de versos I Versificando mayormente al arte Verso por arte a menor tiempo ve Libres sean estos versos de tarde Despojan con creces otrora sed. II ¿Qué […]...
- Cómo es ahora el mar ¿Cómo es ahora el mar? ¿Cómo es ahora el mar? ¿Y el salto del delfín? ¿Y el niño afiebrado, el miedo a las arañas, la […]...
- Aniversario ¿Un verso para salvarte del olvido sobre la tierra? Si es en mí que estás olvidada, el verso recordaría apenas esta fuerza de olvido, mientras […]...
- Recuerdos del hablante I Se manifiesta un sol en tu memoria cuando estabas feliz, feliz de veras. Y en realidad el frío de la nostalgia era lo que […]...
- De niño a hombre Es fácil dejar a un niño a merced de los pájaros. Mirarle sin asombro los ojos de luces indefensas. Dejarle dando voces entre una multitud. […]...
- Confesión del fugitivo Sólo soy feliz yéndome. No entre cuatro paredes, con sus sendas espadas, sino entre aquí y allí, una casa y otra, ajenas ambas preferiblemente. No […]...
- Amor rimado ¿Cartitas a ml en verso? ¡Vade retro! Es forzado el amor en verso escrito Y no estaría bien que el dios chiquito Del viejo Apolo […]...
- Mi deseo Mi deseo ahora: no tener ningún deseo o mejor, sentir gula del canto de un gallo fuera de hora sólo por el gusto de despertar […]...