Tu boca
Para formar tan hermosa esa boca angelical, hubo competencia igual entre el clavel y la rosa, la púrpura y el coral. Mintiendo sombras del bien, […]
Para formar tan hermosa esa boca angelical, hubo competencia igual entre el clavel y la rosa, la púrpura y el coral. Mintiendo sombras del bien, […]
Un enjambre de pájaros metidos en jaula de metal guardó un cabrero, y a cuidarlos voló desde el otero la pareja de padres afligidos. – […]
Padre, pequé, y perdonad si en mi amorosa contienda, se lleva el viento, a mi edad, propósitos de la enmienda. EL CONFESOR – ¡Siempre es […]
Más dulces habéis de ser si me volvéis a mirar, porque es malicia, a mi ver, siendo fuente de placer, causarme tanto pesar. De seso […]
Tanta virtud tu corazón inspira, que piensa el vulgo de entusiasmo lleno, que, al mirarlo tan bueno, el mismo Dios que lo crió lo admira.
Te enseñó, pues quisiste, toda su ciencia, ¿y hoy le preguntas ¡triste! por tu inocencia? ¿Cómo ¡imprudente! querías, siendo sabia, ser inocente?
Cantar quise tus ojos, Luisa mía, mas fue gentil quimera: ¿cómo su lumbre retratar podría, si de esos ojos, que cantar quisiera, nadie el color […]
Velas de amor en golfos de ternura suelta mi pobre corazón al viento, y encuentra, en lo que alcanza, su tormento, y espera, en lo […]
Tras ti cruzar un bulto vi por la alfombra; y era tu sombra. ciego el puñal sepulto… ¡Cuánto, insensato, te amo, que hasta de celos […]
Si es fácil una hermosa, voy y la dejo; si es difícil la cosa, también me alejo. Niñas, cuidad de amar siempre con fácil dificultad.
Que es matarme, confieso, el olvidarme: aborréceme, que eso ya es recordarme. Por Dios le pido que me entregues al odio, mas no al olvido.
Tanto quiero creer, que no te creo, dicha y tormento de la vida mía; veo tu amor tan claro como el día, mas lo anubla […]
El día de su casamiento con D. Salustiano de Olozaga Aunque a la aurora temores, y al mismo sol des enojos, te sientan con mil […]
Aquellas niñas hermosas que en suma beldad conformes, teniendo la tez cual nieve, tengan los ojos cual soles, y el alma sintiendo, tiernas, herida de […]
A S. M. la Reina Doña Isabel II Más que la luz de la razón humana, amo la obscuridad de mi deseo, y más que […]
– Niña, ¿por qué, desvelada, suspiras con tal empeño? – El porqué, madre, no es nada; sólo me siento hostigada por las quimeras de un […]
La niña es la mujer que respetamos, y la mujer la niña que engañamos. Te morías por él, pero es lo cierto que pasó tiempo […]
Caer al río el viento un nido deja, y al verlo un ave, en pos vuela piando, porque dentro, sus huevos empollando, flota embarcada su […]
La del enlutado manto, la de la toca de encaje la de mil hombres encanto, ¿cuánto va a que no es tan santo tu pecho […]
Errante sol de aromas circundado tu ardiente lumbre tenue debilita; que ya mi corazón, de arder cansado, negro sus alas moribundo agita. Grupo de luz […]